Fideuá con Sepia y Gambas: Un Clásico del Verano Mediterráneo
El verano en la costa española tiene un sabor particular. Recuerdo los domingos en la casa de mi abuela, con la brisa del mar colándose por la ventana y el aroma del marisco fresco invadiendo la cocina. Uno de los platos estrella era la fideuá con sepia y gambas, una alternativa a la paella que se convirtió en tradición familiar. Esta receta es más que un plato: es una celebración del Mediterráneo en cada bocado.
En este artículo, te guiaré paso a paso para preparar una fideuá auténtica, deliciosa y perfecta para compartir al aire libre durante los días cálidos del verano. Además, encontrarás consejos útiles, enlaces a recursos externos y la historia detrás de esta joya de la cocina tradicional española.
¿Qué es la Fideuá?
La fideuá es un plato marinero típico de la Comunidad Valenciana, especialmente de Gandía, elaborado con fideos finos en lugar de arroz. Su origen es curioso: se dice que nació a bordo de un barco pesquero cuando el cocinero decidió reemplazar el arroz por fideos para variar el menú. El resultado fue tan sabroso que el plato se popularizó rápidamente en tierra firme.
Aunque existen muchas versiones, hoy nos centraremos en una fideuá con sepia y gambas, ligera, sabrosa y perfecta para el verano.

Ingredientes para 4 personas
- 250 g de fideos finos (fideuá)
- 1 sepia mediana, limpia y troceada
- 200 g de gambas peladas
- 1 cebolla, picada finamente
- 2 dientes de ajo, picados
- 1 tomate grande, rallado
- 800 ml de caldo de pescado, preferentemente casero
- Aceite de oliva virgen extra, al gusto
- Sal, al gusto
- Unas hebras de azafrán (opcional)
- Alioli casero, para servir (opcional pero recomendado)
Cómo Preparar una Fideuá con Sepia y Gambas Paso a Paso
1. Sofríe la Sepia
En una sartén o paellera amplia, calienta una buena cantidad de aceite de oliva. Agrega la sepia troceada y sofríe a fuego medio-alto hasta que empiece a dorarse. Este paso es clave: la sepia debe soltar sus jugos y caramelizar ligeramente para aportar profundidad al plato.
2. Añade Cebolla y Ajo
Incorpora la cebolla y los ajos picados. Cocina a fuego medio hasta que la cebolla esté transparente y empiece a tomar color. No tengas prisa: este sofrito es la base del sabor.
3. Prepara la Salsa de Tomate
Añade el tomate rallado y cocina durante unos 8–10 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que se evapore el agua y obtengas una salsa espesa y concentrada.
4. Tosta los Fideos
Incorpora los fideos a la sartén y mézclalos bien con el sofrito. Remueve durante 2-3 minutos para que se impregnen del sabor y se tuesten ligeramente. Este detalle da un toque crujiente y dorado característico.
5. Añade el Caldo
Vierte el caldo de pescado caliente. Añade sal al gusto y las hebras de azafrán si las usas. Mezcla suavemente para repartir los ingredientes y luego no remuevas más. Cocinar sin remover es esencial para que los fideos se cocinen uniformemente y absorban todo el sabor.
6. Incorpora las Gambas
Distribuye las gambas peladas sobre la superficie. Cocina a fuego medio durante unos 10–12 minutos, hasta que el líquido se haya absorbido y los fideos estén tiernos.
7. Reposa y Sirve
Retira del fuego y deja reposar unos minutos antes de servir. Puedes acompañar la fideuá con una cucharada de alioli casero para intensificar el sabor.
Consejos de Chef para una Fideuá Perfecta
- Caldo casero: Si puedes, prepara un caldo de pescado con espinas de pescado blanco, cebolla, ajo, laurel y un toque de vino blanco. Marcará la diferencia.
- Fideos del número 2: Son los más adecuados por su grosor intermedio. Se cocinan rápido sin perder textura.
- No remover durante la cocción: Así lograrás una textura uniforme y evitarás que los fideos se rompan.
- Alioli auténtico: El toque final ideal. Puedes hacerlo con ajo, yema de huevo, limón y aceite de oliva. ¡Un contraste maravilloso!
Conclusión
Preparar una fideuá con sepia y gambas es una forma deliciosa de celebrar la cocina mediterránea en su máxima expresión. Es un plato lleno de sabor marino, tradición y calidez, ideal para compartir en reuniones veraniegas. Lo maravilloso de esta receta es su simplicidad: ingredientes frescos, una técnica sencilla y el cariño con el que se cocina. Como decía mi abuela, “cuando cocinas con amor, se nota en cada cucharada”.
Si es tu primera vez preparando fideuá, no te preocupes. Sigue los pasos, disfruta del proceso, y verás cómo este plato se convierte en un favorito en tu mesa. Y si ya eres un experto, ¡anímate a darle tu toque personal!